Por otro lado nos recuerda también a los años 20, un tocado pegado a la frente y con redecilla, por lo que encajaría a la perfección con un vestido corto por la rodilla y por que no, con flecos.
El tocado está formado por dos hojas de sinamay superpuestas y revestidas con encaje de guipur. Para aportarle frescura una flor en cuero dorado y abalorios. El protagonista de esta pieza, sin lugar a dudas es el tul que cubre la cara y aporta elegancia.